RECUERDOS DE LA NIÑEZ ( mi casa )

Que bonita era mi casa
que airoso mi velero
que guapa estaba mi madre
que heredó del firmamento
sus ojos como luceros,
hechos de agua y de luz,
de esmeralda y suave fuego.

Pelo negro golondrina
ondulado por el viento,
su cuerpo, blanco de luna,
su rostro de terciopelo,
y sus manos como lazos,
abrazándome en su seno.

Mi barraquita encalada,
blanca como piel de armiño,
con un moral y una parra,
un techado de alquitrán,
una mesita cuadrada
un puñadito de azucar
y un pedacito de pan.

Desde lo alto del monte
¡que bella estaba la mar!
y los barcos en el puerto
dispuestos a navegar.
Y las gavinas (gaviotas) volando
reinando entre los veleros
sobre la mar planeando
gozando el azul del cielo.

Tardes de lunas tempranas
tibias noches de verano
primeros claros del alba.

Entre las uvas y moras
se asomaba a mi ventana
el roció de la aurora.

DIAS VANOS

Días vanos, marchitos,consumidos
evocadores de caducos recuerdos
en hogueras candescentes de nostalgias
cenizas humeantes del pasado.

Esa mirada que busca inquisitiva
en horizontes conspicuos e infinitos,
el hilo conductor imperceptible,
por donde antaño viajaron al abismo.
Donde se pierden las naves pesarosas
de los amores a los que llamo"mios"
Hoy tan solo recuerdos sin rencores
...mis espacios vacíos...

MARIA SOLA

Tu no puedes morir, eres eterna
pacto de amor, timón directo al norte.
tu compañero es hoy tan solo el viento,
tú, gaviota que reinas en el horizonte.

El corazón anclado en aquel puerto´
donde se apeó él, herido por la suerte,
no lo vas a negar, seguirás esperando
a arrebatarlo de los lazos de la muerte.

Y vivirás, renovando recuerdos,
y sobre ti no pasarán las horas,
gobernando tu barca, nave altiva,
escribiendo en el mar, versos que lloran.

Levantando las velas voladoras
por saberte de amor correspondida
adoleciendo sí, de sus palabras
...como duelen las horas, como duelen,
como duelen los días¡
habiendo amado tanto, sin demora,
habiendo sido amada, sin medida
tú, caminando sola, siempre sola.
María sin compañía.
Tu no puedes morir, quedaste anclada
en tu puerto de amor, una mañana fría

MI TENUE LUZ

Si es que aporto un ápice al paisaje
Esa es mi tenue luz, pues soy Lucía
Y que he comprado el tiempo y aligerado mi equipaje
Para poder vivir en sintonía
Que estas cerca del mundo, lo presiento
Y que el mundo se aleja de tu compañía
Que no nos olvidas ni un momento
Y que es tuyo nuestro pan de cada día
No es posible que se pierdan las plegarias
En este caos de duda y desconcierto
Son tantos los sumidos en miseria
Que pienso que pensar es un tormento.
Danos tu luz, reparte tu alegría
Y que nunca nos falte el alimento
Que no es lo mismo alabarte saciados
que perecer perplejos y famélicos.
Que el hombre gobernando es un fracaso
a estas alturas, lo damos ya por cierto
Que es el mortal un alfeñique osado
y es el hombre sin DIOS, género infesto
y el opresor del sumiso y apocado.
En la galerna de este mar revuelto
yo solo soy canción poema y sollozo
ir mas allá me produce desaliento
y si le aporto un ápice al paisaje
esa es mi tenue luz, que va despacio,
desapareciendo.

SOMBRA Y MATERIA

Concluyeron los años y los días
se agotaron las horas
conciliando la vida con la muerte
mañana solo almas insonoras,
tratando de reunir sombra y materia,
mendicante de amor, rosa y espina
buscando rayo de verdad que marque el norte
la blanca Shekinah, la luz divina.

Púrpura plateada, plenilunio
compleja plenitud, llama que muere
No sé por qué atiendo tu llamada
abrazo apasionado, amor que hiere.

Directo al corazón, beso que abrasa
¿con qué brasa inmortal estoy viviendo
que vivir es morir sufriendo
y muriendo reviven nuevas llamas?

Y me despiertas con los que día a día
a la muerte inmortal vida le llaman.
Vil enemigo que arrebata los sueños
que te roba el candor y la inocencia
y te deja desnudo ante la ciencia
de que ni de ti mismo eres el dueño.

Tan solo somos polvo, una quimera
siquiera sueños, sombras de las nubes
cada vez más allá de la materia
que desciende veloz, igual que sube
para darse de bruces en la tierra.

Y le reímos al mundo la comedia
el espectáculo de esta gran mentira
de llamarle vivir a esta miseria.

EFEMERIDES

Nostalgias

El sumiso pensamiento
musa íntima y callada
nos deja en la encrucijada
víctimas de las nostalgias,
con nuestros seres queridos
deambulando por el alma.

Recuerdos adormecidos
que se filtran en las noches
abusando del poder
de ese amor, latir divino
que nunca abandona al ser.

Y en nuestro pecho dolido
nos vienen a visitar
agitándonos el sueño
y no quieres despertar.

Se van los que más quisimos
los que más nos han querido.
La Parca aparca en la puerta,
aunque pongas dos pestillos.

Nos decía un gran poeta:
”¡Qué solos quedan los muertos!”
Escribió Carmelo Vilches:
“¡Qué solos quedan los vivos!
y ¿a dónde van?” cuerpo triste
que arrastras este castigo.

¡Qué fácil vivir contigo!
¡qué duro es sufrir tu ausencia!
que es la muerte el enemigo
que destruye las vivencias,
tronzando las esperanzas
llevándote a la demencia.

Un prión que agujerea
nuestros sueños más queridos,
solos en la multitud,
el reo, el inocente
el tonto, el sabio, el listo,
rico, pobre , miserable
todos sufriendo lo mismo.

¡Qué solos quedan! ¡qué solos!
¡qué solos quedan los vivos!
tan solo los que lo saben
saben lo poco que existo